viernes, 29 de julio de 2011

Los cigarrillos se consumen, las cervezas se terminan, las uñas se cortan... y alguien alguna vez me preguntó: "¿Vos creés que el amor se acaba?" y yo sólo pude responder que no, el amor sigue estando para toda la vida en forma de recuerdos y no de sentimientos, que era imposible que se acabe.
El amor es como los puntos suspensivos de la vida, no el amor, sino aquellos sentimientos que podemos definir como mutuos entre dos personas que no son consideradas amigas. 
Por qué puntos suspensivos? Porque siempre los usamos para decir algo que se supone implicito, para rellenar los espacios vacíos donde no hay palabras que entren, para usarlos como silencio donde no hay nada más que decir, para usarlos de puente entre dos oraciones. Un puente entre dos partes, entre dos personas donde no hay palabra que llegue a definir lo que hay de por medio.
Ahora la pregunta sería: ¿Vos creés que los puntos suspensivos se acaban?, y yo respondería que no, que podríamos extenderlos hasta cuando querramos y después simplemente suprimirlos.
Aunque todavía no quiero . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

1 comentario:

  1. resumiendo
    no somos lo que somos
    ni menos lo que fuimos

    tenemos un desorden en el alma

    pero vale la pena sostenerla
    con las manos / los ojos / la memoria

    tratemos por lo menos de engañarnos
    como si el buen amor
    fuera la vida

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